¿Les suena un lugar llamado Cabo Norte? Está en Escandinavia, a orillas del océano Glacial Ártico (¡BRRR!, ya tengo frío de solo pensarlo), y es precisamente el lugar donde el señor Silver nos propuso que pasáramos las vacaciones de verano. ¡Adiós, tranquilidad! Viajando en autocaravana con Leo, Martin y Rebecca, teníamos todos los números para acabar en la boca del lobo, o... mucho PEOR: ¡en la de un troll horripilante!

Damián Drake rescata a su perro Víctor y la hazaña sale en el periódico. Eso hace que Francis, una niña muy diferente a él, le escriba una carta. Tras esta carta vendrán muchas más. Pero ambos niños tardarán en descubrir que la correspondencia establecida entre ellos es realmente peligrosa.

Lo de Kamil es algo increíble. No le tiene miedo a nada, ni al fuego, ni a los sapos, ni al dentista... ¡ni siquiera al Loco Manfredi! Es más, Kamil no duda en meterse en la boca del lobo para defender a quien haga falta de Manfredi y los demás. Pero tanto arrojo y tal desprecio del peligro no es normal, o eso cree el doctor Wasim, que investigará el origen y las consecuencias de la extraña conducta de Kamil.

Garrapata y Carafoca andan perdidos por el túnel del tiempo y cuando por fin logran salir, se encuentran nada más y nada menos que en la China, en el 246 antes de Cristo, año en el que gobernaba el terrible emperador Shi Hoang Ti...

En su constante peregrinar por el mundo, Garrapata y su fiel compañero, Carafoca, han caído prisioneros en una terrible cárcel china. Pero ambos piratas, no se atemorizan ante nada. Consiguen escapar y llegar a la corte del Emperador Shi Hoang Ti.