Una historia ilustrada e interactiva que se inspira en el mundo de los videojuegos y en el universo de los célebres Willyrex y Vegetta777. Un relato mágico salpicado por ilustraciones y los iconos más representativos del universo de estos dos gamers. Su princi­pal intención es buscar la participación del lector, animándole a intervenir en el desarrollo de una historia apasionante. Vegetta777 y Willyrex nos proponen un juego interactivo, buscan la complicidad del público y confían en obtener de sus seguidores una respuesta entusiasta a esta llamada a implicarse en un proyecto tan peculiar.

Es el cumpleaños del abuelo de Miguel, pero será él quien le regale algo a su nieto. Al volver del colegio, el niño encontrará en el jardín una fantástica nave espacial, a la que bautizarán como X-Leonora. Con ella recorrerá el universo y se encargará de llevar a cabo una misión muy especial.

En esta entrega de La Banda de Zoé descubre, ¡Barcelona! En la maravillosa capital mediterránea van a celebrarse los premios más importantes del mundo de la música, los ENTIVÍ. Matilde es la presentadora, y además una de las artistas nominadas. Zoé y sus amigos se mueren de ganas por ir y cuando finalmente lo logran y todo está listo para la gala, la cantante de French Conection ¡desaparece! La Banda comienza una frenética búsqueda por las calles de la ciudad. ¿Lograrán encontrarla a tiempo para la gala?

La nueva aventura de Zoé y su banda en... ¡Roma! ¿Qué tienen en común una princesa en zapatillas, la directora de una revista con cara de pollo, un famoso diamante y un taxista chiflado? ¡ROMA! ¡Y a La Banda de Zoé! Pues sí, Marc, Liseta, Álex y Zoé (bueno, y Kira) tratan de desenmascarar a una impostora aún peor que Amanda. Y para ello tendrán que recorrer la ciudad eterna... ¡cómo sea! ¿Te atreves a acompañarlos? ¡GENIAL!

Para Winnie el aseo es parte de sus quehaceres diarios, sobre todo después de hacer gimnasia o antes de comer. Pero para Rito es tiempo perdido y no comprende por qué es necesario. Cangu, con la ayuda de Winnie, hará lo posible para mostrar a Rito los placeres de lavarse.